El Celtic le ganaba como visitante por 2-1 al Ross County por la Premier League escocesa y sacaba más ventaja en la cima del torneo, pero el árbitro Don Robertson cobró un penal insólito. Alex Schalk, del local, se desplomó en el área sin o alguno con el defensor Erik Sviatchenko y el juez compró.
Sólo faltaban tres minutos para el cierre cuando ocurrió esta situación y los jugadores del Celtic, desesperados, protestaron hasta el cansancio. Sin embargo, Liam Boyce no perdonó y empató el duelo tras la inesperada ayuda. Ver para creer.