Pocos lo conocen: el paraíso de la tranquilidad en la costa de Buenos Aires
Con una combinación única de médanos, bosques y playas serenas, este rincón ofrece naturaleza intacta y calma total, lejos del turismo masivo.
A tan solo unos kilómetros del centro de Claromecó, una pequeña comunidad rodeada de verde y arena permanece fuera del radar de la mayoría. Se trata de Dunamar, una urbanización con aire de refugio escondido que, pese a contar con menos de 200 residentes estables, sorprende por su riqueza natural y su atmósfera relajada.
El principal atractivo del lugar es su entorno: desde la arena dorada hasta el espeso monte, todo en este paraíso invita a bajar el ritmo. En contraste con balnearios más concurridos, Dunamar, partido de Tres Arroyos, ofrece una experiencia de conexión con lo esencial, ideal para quienes buscan una escapada sin interferencias.
Además del descanso, hay opciones variadas para disfrutar del aire libre; los visitantes pueden realizar cabalgatas por la playa y el bosque, paseos en cuatriciclo entre las dunas, practicar kitesurf o animarse a la pesca deportiva tanto en el mar como en el arroyo Claromecó.
Llegar hasta Dunamar es simple: desde la Ciudad de Buenos Aires hay que tomar la Ruta Nacional 3 hasta Azul y luego empalmar con la Ruta Provincial 85 rumbo a Tres Arroyos. Una vez allí, la Ruta Provincial 73 lleva hasta Claromecó, y tras cruzar el arroyo del mismo nombre se accede al destino final.
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